La Transformación Digital es una realidad presente en la sociedad y de gran relevancia en el mundo empresarial hoy en día. La transformación digital se puede definir como la integración de las nuevas tecnologías en todas las áreas de una empresa para cambiar fundamentalmente la forma en la que esta opera y brinda valor a sus clientes. El objetivo de esto es optimizar los procesos, mejorar la eficiencia y la competitividad, ofrecer un nuevo valor añadido, gestionar el riesgo y descubrir nuevas oportunidades de negocio.
Por tanto, la digitalización no está enfocada a la tecnología utilizada (Big Data, Cloud, Internet de las Cosas o IoT, Inteligencia Artificial, etc.) sino en utilizarla para lograr los objetivos marcados. La transformación digital irá siempre ligada a los objetivos y estrategias empresariales.
Estar abierto al cambio es una de las claves en la digitalización. La Transformación Digital necesita e implica un cambio de mentalidad en todas las personas de la organización, desde los altos directivos, que deben considerarla una prioridad, hasta cada uno de los empleados de la organización, ya que también supone un gran cambio cultural en la misma. Es una apuesta de futuro hacia nuevos métodos de trabajo que aprovechen todo el potencial de la digitalización para mejorar los resultados, por lo que requiere de nuevas aptitudes y capacidades.
Integrar las nuevas tecnologías digitales en su estructura ya no debe considerarse una opción para las empresas, sino una necesidad. Sin embargo, en algunas ocasiones, el desconocimiento, el miedo o los mitos en torno a la Transformación Digital hacen que muchas empresas se resistan al cambio.
Las principales ventajas de la Transformación Digital son las nuevas oportunidades de negocio, la mejora de la experiencia del cliente, la eficiencia de los procesos… y las principales barreras son la resistencia al cambio y el coste. Un estudio del Massachusetts Institute of Technology demuestra que las empresas más tecnológicas son más rentables y tienen clientes más satisfechos, lo que significa una mayor competitividad.
Según el Informe Minsait de Madurez Digital, la mayor debilidad de las corporaciones españolas se encuentra en la innovación y creación de nuevos modelos de negocio. Solo el 21% de las empresas recopilan y tratan los datos para ofrecer productos y servicios personalizados, pero el 95% espera ser capaz de optimizar la calidad, el conocimiento y la explotación de los datos en unos años.
Por otro lado, el informe de Siemens sobre el reto de la Transformación Digital de la economía en España, afirma que la mayoría de las empresas españolas reconocen que va a haber un gran cambio digital y que, por tanto, la digitalización es la mejor manera de adaptarse y evolucionar.
A día de hoy, es un hecho que los cambios se producen a una velocidad de vértigo. El mundo empresarial ha cambiado y continúa haciéndolo, y, por este motivo, las empresas deben transformarse y evolucionar para no quedarse atrás.