¿En qué invierto mi dinero? ¿Dónde puedo hacerlo de forma segura? ¿Qué inversión puede darme la mayor rentabilidad con el menor riesgo? Todas estas preguntas se engloban dentro de las típicas cuestiones que se plantean muchos inversores que buscan reducir la incertidumbre y encontrar certeza a la hora de gestionar y hacer crecer sus ahorros.
A menudo se dice que emprender es algo inherente al ser humano y a su motivación por querer cambiar el mundo o hacer algo que nadie antes se haya atrevido a hacer. También se dice que emprendedor, en parte, se nace pero que sobre todo se hace y que la clave del emprendimiento es tener la capacidad de generar ideas innovadoras y hacerlas realidad.
A pesar de que el metaverso, esa interacción mediante avatares en mundos virtuales, es incipiente, se está consolidando como la gran tendencia a explorar por parte de las compañías …
La figura que más está desencadenando la necesidad de innovación, no es otra que la del propio cliente. Partiendo de esta premisa, hoy más que nunca, es necesario crear experiencias de clientes únicas que permitan satisfacer sus expectativas, poniendo al cliente en el centro de todo y favoreciendo, de esta manera, una sólida fidelización del mismo.
Las aseguradoras se han visto obligadas a acelerar aún más sus procesos de digitalización a raíz de la pandemia. En consecuencia, desde el sector, se está apostando fuertemente por la omnicanalidad en la distribución, impulsando canales como el telefónico o internet, así como creando nuevas fórmulas de hacer llegar los productos asegurados al cliente.
¿Acaso la generación de ideas está únicamente reservada a aquellas personas que consideramos personas imaginativas o se trata más bien de una capacidad innata que todos poseemos? ¿Cómo funciona el pensamiento creativo y cómo se generan las grandes ideas? En este capítulo obtendremos luz sobre estas preguntas y a cómo funciona nuestra mente creativa.
